El próximo día 5 de Febrero manifestantes en varias ciudades del mundo cometeremos de forma coordinada un placebocidio homeopático (del que ya hemos hablado aquí) para llamar la atención sobre el asunto y sensibilizar a la opinión pública de que la homeopatía no sólo no funciona sino que no es posible que funcione. De este modo, el objetivo más importante es animar tanto a consumidores como a médicos y farmacéuticos para que recurran a los medicamentos que realmente han demostrado efectos (positivos) en la salud de los pacientes.

Buscando las palabras perfectas para iniciar este post recordé este tweet del buen Borja Robert. Últimamente siempre me sucede lo mismo, investigo en las fuentes apropiadas (para mi) para cada tema concreto y encuentro que siempre llego tarde (o siempre otros llegan antes) y las palabras apropiadas ya se encuentran a disposición del público. Como apunte final a esta especie de disculpa por ser tan breve e infrecuente, dado que el público de este blog no tiene por qué leer los sitios que yo leo (ni falta que hace), no viene mal repetir ciertos textos si éstos lo merecen. Me veo por ello obligado a dejarles dos párrafos de un genial artículo de Steven Novella (presentador habitual del podcast semanal The Skeptics Guide to the Universe, que tanto lamento no haber reseñado aún).

The 1023 campaign is a UK based organization whose purpose is to raise awareness of the actual claims of homeopathy. The name is a reference to Avogadro’s number (6.02214179×10^23), which is the number of atoms or molecules of a substance in one unit called a mole. This is an important basic concept in chemistry, for it means that there are a finite number of bits of a substance in any solution, which further means that solutions cannot be infinitely diluted. You cannot have fractions of a molecule of any substance. There is therefore a dilutional limit – a point beyond which if you further dilute a solution you are increasingly likely to have removed all of the original substance.

Homeopathic preparations frequently use serial dilutions that vastly exceed this dilutional limit. This is a central fallacy of homeopathy (what homeopaths call a “law” of homeopathy). Samuel Hahnemann, who invented the fiction of homeopathy, knew about the dilutional limit but believed that substances gave their magical essence to water when diluted. Modern homeopaths believe this too, but in order to make their nonsense more marketable to a 21st century culture a tad more used to science (or at least scientific jargon) than Hahnemann’s, they have desperately tried to wrap “ magical essence” in sciencey technobabble.
[...]

Les dejo con la nota de prensa publicada a nivel nacional. Si desean colaborar o participar pueden contactar con la organización o si les resulta más cómodo incluso conmigo que estoy (y estaré el próximo día 5) muy próximo a ellos.

“Sobredosis” homeopáticas contra la homeopatía
Activistas por los derechos de los consumidores de toda España han anunciado hoy su intención de “ suicidarse” tomando una “ sobredosis” de homeopatía como parte de una protesta masiva global contra estos remedios alternativos.

El 5 de febrero, manifestantes en varias ciudades españolas ingerirán cajas enteras de pastillas homeopáticas para sensibilizar a la opinión pública de que los remedios homeopáticos son completamente ineficaces y, además, presionar a farmacéuticos y otros agentes sanitarios a garantizar que los productos que venden como tratamientos médicos realmente funcionen.

Fernando Frías, portavoz del grupo, comenta: “La mayoría de la gente no sabe que las pastillas homeopáticas no son remedios naturales, que no están hechos con plantas medicinales. De hecho, incluso los homeópatas reconocen que sus pastillas no contienen nada más que agua y azúcar.

Estamos organizando esta protesta para mostrar que estas -mal llamadas- medicinas no tienen ninguna utilidad y, por tanto, no deberían formar parte del tratamiento médico de nadie. Ni homeópatas ni farmacéuticos deberían estar vendiendo estos medicamentos falsos a personas con enfermedades reales. Son una pérdida de tiempo y de dinero”.

La protesta la organizan distintos colectivos escépticos, racionalistas y de defensa de los derechos de los consumidores en apoyo de la Campaña 10:23 ¹, una protesta global contra los remedios homeopáticos originada en el Reino Unido. Eventos similares se desarrollarán simultáneamente en más de una decena de países alrededor del mundo; entre otros, Estados Unidos, Alemania, Australia, Holanda, Bélgica, Hungría, Argentina o Canadá.

Michael Marshall, coordinador de la campaña internacional, dijo “Queremos demostrar que existe una sensación creciente de que ya se han invertido demasiado tiempo y dinero en los remedios homeopáticos.

En los 200 años de existencia de estos tratamientos nunca ha habido ningún tipo de evidencia de que puedan funcionar, y, porque no son más que azúcar y agua, es imposible que puedan hacer lo que los homeópatas afirman que hacen.

Se gastan miles de millones de euros anuales en estos tratamientos ineficaces y, cuando se dice lo que realmente son, y cómo se fabrican, la mayoría de la gente se sorprende de que sigan vendiéndose a un público no adecuadamente informado”.

La Campaña 10:23 se lanzó hace un año en el Reino Unido, con casi 400 manifestantes tomando parte en sobredosis homeopáticas por todo el país protestando por las declaraciones de la principal cadena de farmacias británica, Boots, que justificó la venta de pastillas homeopáticas “porque los clientes las compran, no porque sean eficaces”.

La campaña recibe su nombre del número de Avogadro, una constante científica que expresa el número de moléculas existentes en un mol de cualquier sustancia y que sirve para demostrar que muchas pociones homeopáticas no contienen principio activo alguno, y que las que lo contienen lo hacen en unas dosis tan bajas que nunca pueden producir ningún efecto.

Aunque algunos puedan argumentar que no hay nada de peligroso en dispensar pastillas de azúcar, que farmacéuticos o personal sanitario avalen la eficacia de los tratamientos homeopáticos acarrea graves consecuencias. Además de minar la confianza de la opinión pública en los servicios sanitarios, se puede animar a pacientes con enfermedades graves a buscar en la homeopatía una alternativa a la atención médica real.

Un triste ejemplo es el de Gloria Sam, de sólo nueve meses, que murió en 2002 a causa de las infecciones provocadas por un eccema que sus padres decidieron tratar con homeopatía. Recientemente, una investigación llevada a cabo por la BBC ha mostrado a homeópatas que intentaban suministrar a viajeros sus ineficaces preparaciones para usarlas como sustituto de medicamentos reales contra la malaria, e, incluso, ofrecían alternativas homeopáticas a las vacunas.

El Reto 10:23 pretende conseguir el apoyo de más de 1023 ciudadanos en más de 10 países y 23 ciudades durante el 5 de febrero de 2011.

Contacto nacional:
1023es@gmail.com
Fernando Frías / +34 644 24 28 59
Borja Robert / +34 668 86 18 05

Contacto internacional:
Michael Marshall / contact@1023.org.uk / +44 7841 134 309

1. La la Campaña 10:23 (10:23 Campaign) es una red de agrupaciones escépticas que pretende sensibilizar a la opinión pública sobre la realidad de la homeopatía, por qué sabemos que no funciona y por qué es importante que la ciudadanía reciba la información necesaria para permitirles tomar una decisión realmente informada sobre su salud. http://www.1023.org.uk ↑

Si han llegado hasta aquí les felicito y como premio aquí tienen una foto mía tomada hace unos minutos con la camiseta de la Campaña 10:23.