Hoy, a eso de las 19:00, ha estado a punto de caerme un camión encima. Literal. Seré breve.
El camión-grúa venía en dirección opuesta a la mía, a bastante velocidad, y con la pluma levantada sin darse cuenta. El choque contra el puente ha sido bestial, el camión levantó el morro bastante y terminó volcando hacia su derecha (según el sentido de su marcha) derramando varios palés de ladrillos.
Si llega a volcar hacia su izquierda, ahí estabamos mi coche y yo.
Tras el enorme susto, di marcha atrás corriendo por si se balanceaba el camión y bajé a ver a los ocupantes, conductor y copiloto.
Salvo bastante desorientación y seguro alguna contusión (me pareció que no llevaban el cinturón) no parecían tener nada grave. El conductor miraba atrás y se echaba las manos a la cabeza, temiendo seguro por su trabajo.
Al poco ya había coches tratando de pasar en el sentido en que venía el camión.
Tenía bastante prisa, el camión venía de una obra cercana y aquello se llenó rápido de obreros, capataces y curiosos. Todo estaba controlado y pude seguir mi camino tras hacer con el móvil algunas fotos y grabar un video.